miércoles, 1 de abril de 2015

Con amor y dolor, Héctor Pérez Ramírez

Radio Progreso, la legendaria emisora de la familia cubana una vez más de luto.
31 de marzo de 2015 fecha para la historia de la radio nacional cubana.
Se nos va otro multifacético y gran Maestro.
Me disponía a salir rumbo a mis responsabilidades frente a los micrófonos de la también conocida como La Onda de La Alegría y recibo la lamentable e inesperada noticia del fallecimiento de Héctor Pérez Ramírez, un ser excepcional, y podría calificarlo con innumerables palabras de elogio porque nadie duda de su bondad como ser humano.
No solo me concedió en tres ocasiones entrevistas en vivo para la radio revista RP 105, sino que con él pude compartir 101 capítulos en las Aventuras “La leyenda del Prado”.
Tengo que agradecerle a otra grande, la cariñosa Carmen Solar, haberme escogido para narrar ese popular espacio y así verlo hilvanar con su insuperable profesionalidad uno de los personajes destinados a los más pequeños de casa.
Como actor me hizo erizar los pelos de punta en varias ocasiones y aún me parece un sueño el haber llevado con mi voz los gestos y matices que se necesitaba para apoyar su magistral interpretación.
Es lógico que nunca podría llegar a la altura de un grande como él y hasta vergüenza sentí el narrarle, además su histrionismo era tan hechizante que estoy convencido que en el momento de su papel solo con su voz era suficiente para que el oyente imaginara cada detalle de su rostro.
No era mi amigo, nunca compartí con él un café, una salida o una invitación personal, sin embargo cuando nos encontrábamos por los amplios pasillos de esta casa grande, me abrazaba y me daba un beso con el cariño paternal que solo él era capaz de brindar a los que nos iniciamos en este difícil arte de los medios de comunicación.
Su rostro inspiraba una confianza y amor que hoy extraño con gran dolor, y es que esta noticia me ha llegado al alma, me duele el pecho como su hubiese perdido a un familiar.
Y claro, aquí en Radio Progreso todos somos una gran familia a la cual llegó en el año 1990 imponiendo su peculiar estilo como escritor, director y actor.
Su huella ha quedado en espacios del dramatizado como “Así se forjó la Patria”, “La novela de las dos”, “La Gran Aventura de la Humanidad”, “Huellas” y también en el campesino “Fiesta Guajira”.
Su inicio aquí fue con “Reto a la imaginación” y precisamente con su don nos hizo imaginar la vida misma desde las ondas de la emisora más popular de la radio cubana, esa que siente sano orgullo por haberlo tenido entre sus grandes Maestros y la que hoy lo llorara con inmenso dolor.
Profe, así le llamaba, y a usted, desde mi blog y sentado frente a estos micrófonos, mi amor, mi cariño.
Descanse en paz MAESTRO.