La Habana es la
ciudad que todos quieren visitar, muchos desean vivir y muy pocos pueden
habitar.
Regulaciones
migratorias lógicas.
De continuar
por el camino que llevaba la emigración desde otras provincias en los años 80
del pasado siglo, sería un caos total.
Una popular
canción de esa época dice: “La Habana no aguanta más…”
No sé de
estadísticas del tema pero con los años de convivencia en la capital de todos
los cubanos, no creo que haya disminuido mucho la cantidad de personas que han
optado por acompañar a los habaneros.
Las maneras de
hablar de cada región del país delatan a muchos.
Mientras, yo me
dedico a mi trabajo y a regalar estas imágenes de La Habana, donde el caos
arquitectónico se vislumbra entre añejas construcciones de disímiles maneras de
mostrar ese arte, hasta lo más moderno de las corrientes internacionales.
La Habana es la
misma y diferente en cada esquina, es un mundo por descubrir dentro de su
propio entorno y por mucho que caminemos siempre nos quedará otro mundo
pendiente que caminar.
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