Una gran deuda
pendiente tenía con un viaje que no se ha vuelto a repetir.
Regresar a mis
raíces me ha sido difícil.
En ese viaje quedaron
historias y rostros de la familia, personas que ya no están en vida y que
quedaron eternizados tras el lente.
Más que
anécdotas será la fotografía la protagonista, como siempre, de mis artículos en
el blog.
Gracias a la cámara de mi eterno amigo Evelio
Medina Rodríguez, el cual tampoco me acompaña en vida, pude evidenciar en
imágenes a finales de 2009 e inicios de 2010, la humildad y sencillez de mi
familia materna la cual vive en la región oriental de Puerto Padre de la
provincia de Las Tunas.
No en la ciudad,
sino en los campos de esa hermosa zona de la geografía cubana.
Los invito
desde esta edición a acompañarme y honrar a los abuelos, los tíos, los primos,
y todos los seres que conforman “la familia”.
Ya conversaremos
y disfrutaremos de fotos de gran ternura visual y espiritual.
Gracias por
estar.
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