Se extraña a morir mi islita del Caribe allá en el archipiélago de Los
Canarreos, pero mientras la vida transcurre en La Habana, caminar sus calles y
descubrir sus costumbres, su gente, su modo de pensar y de actuar, me alimenta
el alma.
Hay que adaptarse a los
cambios, ya sean buenos o malos, porque la vida es así, llena de momentos, de
situaciones, de melancolía o alegría.
Muestro al mundo a través de
este fotorreportaje, de esta serie, esos pequeños momentos en la vida del
habanero o del visitante, donde podemos ver a un turista eternizando con su
lente los detalles de la ciudad, a una pareja o amigos sentados en un parque, a los bicitaxistas, los boteros con sus añejos autos americanos, los coches de
caballos, los ómnibus o guaguas y la gente en largas colas para llegar a su
destino, los tanques desbordados de basura, la señora con su perro o el otro
can durmiendo plácidamente en la parada del ómnibus…
Esa es la vida, con su gente,
sus colores, sus sombras y luces, sus detalles de la vida diaria…
Sencillamente, descubra a Cuba en imágenes aquí en Carapachibey.
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